Gracias por molestarme Señor Mejide

Gracias por molestarme Señor Mejide. No lo digo por ser cortés ni adulador. Seguramente él nunca lea esto pero aún así tenía que expresarlo en voz alta.

Después de leer unas cuantas columnas de Risto Mejide en “El Periódico”, creí que era el momento de dar un voto al señor con gafas. No fue un voto fácil. Las pocas veces que le había visto en la televisión me había sorprendido. Es bastante insólito ver a alguien con inteligencia en la televisión y mucho más mezclada con ironía y, por todo ello, no quería una decepción. Una decepción como la que me causó Josef Ajram que ya os adelanté en el post sobre su libro “No sé dónde está el límite pero sí sé dónde no está”. Al menos desde un punto de vista literario.

Creo que ahora con las nuevas tecnologías, si alguien quiere difundir su palabra puede utilizar otros medios que no tienen porqué ser la escritura o, al menos, no cobrar un dinero por el libro. Grábate con el móvil, haz un podcast… cualquier vía es buena pero, por favor, no me hagas perder mi tiempo, mi dinero y lo peor de todo, no te dejes en ridículo.

Con esta pequeña perspectiva de lo que me deparaba, abrí la portada de “ANNOYOMICS, El arte de molestar para ganar dinero”. Mi visión a lo largo de las primeras 80 páginas del escritor fue fluctuando, hasta que hubo un momento que me percaté que estaba valorando más al escritor que a la obra. Por ello, decidí volver a la primera hoja y leer sin la voz de Risto en mi cabeza.

Foto: http://www.planetadelibros.com

Es curioso porque creo que gracias a este cambio conocí al autor por la obra o por lo menos, la parte que él quería que conociera. Hay algo bastante claro. Únicamente percibes lo que él quiere.

Si tuviera que destacar algún aspecto sobre las cualidades que pone de manifiesto, me quedaría con una en la que no hace demasiado hincapié. Es un currante. Ni más listo ni más tonto. Sólo que mientras tú ves sus programas él está estudiando como un poseso para conseguir molestar, porque seamos claros, un idiota no molesta, puede incordiar pero al final del día pensarás en el pobre desgraciado que suficiente tiene con vivir con sus taras.

Para conseguir la faceta que muestra frente a la cámara hay que conocer. Conocer el medio. Conocer el público y conocer de qué se habla. Todo ello lo he comprobado cuando he finalizado el libro haciendo un barrido de sus apariciones en televisión en youtube. Puede gustarte más o menos, pero detrás de lo que dice existe una fundamentación muy sólida.

Foto: eleconomista.es

En mi caso, he leído el libro por puro placer. El mundo de la publicidad, el marketing y demás formas de comunicación me pillan un poco alejadas de mi profesión. Sin embargo, cuando pensé en escribir este pequeño post sobre Annoyomics me propuse empezar con un “Ruego al señor Mejide que no vuelva a coger un boli y, si quiere hacerlo, previamente acuda a una clase de primero de bachillerato del instituto más cercano a su casa donde le enseñen lo básico de la creación literaria”. Todo ello para llevar a cabo el arte de molestar. Sin embargo miré la portada y me faltaba la segunda parte. Con ello no iba a ganar ni un Euro y engañaros por placer, sinceramente no me parecía bien.

Así que en vez de ello, volví al libro y fui viendo todos los links que anexa, curioseando como un niño en una tienda de chucherías. La mayoría de ellos son muy entretenidos para cualquiera con un ápice de curiosidad. Al final me invadió un sentimiento de tristeza al carecer de esa capacidad creativa que rezuman todos esos genios.

No quería finalizar esta pequeña entrada sin hacer una pequeña reflexión. Somos en general personas muy manipulables. Nos manipulan los periódicos, la radio, la televisión, los anuncios que vemos en la marquesina de la parada de autobús…. Pensar en ello e intentar razonar por vosotros mismos y no dejaros lobotomizar.

Foto: 20minutos.es