Hello I’m Johnny Cash. Con esta frase se presentaba, cada noche de recital el músico americano. Oriundo de Nashville, y conocido como el hombre de negro, este irremplazable pistolero de country nos abandonó tal día como hoy hace ya una década.
Foto: www.punknews.org
Vivió el desenfreno desayunando droga, se enamoró de una gran mujer llamada June Carter, tuvo una difícil relación con su padre e, incluso, tocó para los presos. Se le considera uno de los esenciales de la música y nunca se desligo de su pasión musical; grabó discos hasta la fecha de su muerte. Artista respetado y valorado, ha sido numerosas veces homenajeado con premios de todo tipo y celebraciones a sus composiciones.
No quiero incidir más en su vida, porque me llevaría siglos analizar su recorrido. Simplemente me gustaría mandarle un saludo y decirle que sus letras nunca quedarán en el olvido. La fuerza con la que arremetía en los escenarios era única, y la forma en la que empuñaba su guitarra le convertía en guerrero y esa mirada… Esa mirada que te desnudaba y que conseguía persuadir a cualquiera.
Foto: www.hoyesarte.com
Les dejo a continuación un artículo en el que se encuentra su huella:
Y, para finalizar, una selección de tres canciones suyas que les provocarán escalofríos…
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